Potaje de habas tiernas con su vaina.

INGREDIENTES PARA DOS PERSONAS:

250 gramos de habas tiernas con la vaina.

2 patatas medianas cortadas a cascos pequeños

60 gramos de garbanzos cocidos aproximadamente.

Medio pimiento verde cortado a cuadritos.

Media cebolleta pequeña cortada a cuadritos.

1 tomate pequeño sin piel.

1 pimiento rojo seco.

2 dientes de ajos pelados.

Aceite de oliva virgen.

2 o 3 hojas de laurel.

Comino en grano.

Colorante alimentario.

Unas ramitas de perejil.

Sal

Pimienta molida.

ELABORACIÓN.

En una olla adecuada, ponemos agua a hervir con un poquito de sal y unas hojas de laurel. Lavamos bien las habas y le quitamos la hebra que tienen en cada lado. A continuación cortaremos las vainas, en trozos de 2 o 3 centímetros de largo poniéndolas a cocer unos diez minutos, en cuanto este el agua hirviendo. Las escurriremos cuando estén cocidas al dente y no pasadas. Las reservaremos para más adelante.

Echamos suficiente agua en un cacharro, para hacer este potaje (ya que es en crudo) y además, le echamos un buen chorreón de aceite de oliva virgen. Añadimos la cebolleta, una pizca de colorante,el pimiento verde, el tomate entero, los ajos, el pimiento rojo seco, dejando que cueza entre 15 a 18 minutos. Pasado este tiempo sacamos el tomate, el pimiento rojo y los dientes de ajo para hacer el majado, junto al comino en grano. Dejaremos el majao apartado para incorporarlo después.

Echaremos al caldo primero, las patatas dejando cocer un rato, para después los garbanzos y el majao que teníamos reservado, dejando que cueza un poco mas el potaje. Por último echaremos las habas cocidas, dejando un ratito más cociendo, pero ya a fuego lento. Ya tenemos listo este potaje tan rico.

Este potaje es muy similar a otros en su elaboración ya, que es todo en crudo y casi con los mismos ingredientes excepto las habas con su vaina. En mi familia, siempre se han comido las habas tiernas de esta manera, y me consta, que muchos lugareños también las comen así. Tengo que decir, que hace dos o tres lustros, no se solía utilizar las habas tiernas por estas fechas, ni por estas tierras. Primero, no las vendían por aquí, y segundo, las habas ahora están pequeñas, ya que aquí el invierno es bastante frío y no las dejan desarrollarse hasta que va entrando la primavera, que es cuando dan su fruto. Hoy día, con la masificación es fácil comer cualquier cosa, de cualquier lugar del mundo, por lo tanto, yo consumo este producto, muchos más meses que antaño porque me encantan. Una raspa de bacalao acompañada de unas habas tiernas, un trozo de tomate y un chato de vino del país, es gloria bendita para el cuerpo.