INGREDIENTES.
1 litro de agua aproximadamente.
Uvas al gusto.
20 o 25 almendras escaldadas y sin piel.
2 dientes de ajo.
250 gramos aproximadamente de miga de pan de unos días.
3 o 4 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen
aproximadamente.
2 cucharadas de vinagre aproximadamente.
Una pizca de pimienta blanca molida.
Sal.
ELABORACIÓN.
Ponemos a remojar el pan un ratito antes de elaborar esta
sopa fría. En una almirez, o en un mortero, ponemos un poco de sal y el par de
dientes de ajo pelados, lo majamos un poco. Seguidamente añadimos las almendras
sin nada de piel, y machacamos un poco las almendras. Echamos este majado en un
recipiente adecuado junto con la mitad del agua, el pan previamente escurrido,
el aceite de oliva virgen, y una pizca de pimienta blanca molida. A
continuación, le damos túrmix hasta que quede todo muy fino, rectificando si
hiciera falta, con más agua, la sal, el pan, el aceite. Una vez lo tengamos
listo el ajo blanco antes de servir lo meteremos en el frigorífico unas horas y a la
hora de servir lo echaremos en tazones que era como se hacía antiguamente,
añadiendo las uvas peladas y desgranadas.
Esta sopa fría antaño se elaboraba en un librillo, o en
mortero adecuado majando todos los ingredientes con mucha paciencia hasta tener
la textura adecuada. Yo muestro esta receta utilizando el túrmix, y en la
versión chupito como un trago corto, elevando a otro nivel esta sopa fría,
autóctona de tierras cordobesas.
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